Plantar una palmera datilera enana

Las palmeras datileras enanas también son conocidas como Phoenix Roebelenii. No te dejes engañar por la palabra "enana", ya que estas palmas, originarias de Laos y del sudeste asiático, pueden alcanzar un tamaño de 10 pies de altura. Las palmeras datileras enanas son utilizadas con frecuencia en paisajismo, al igual que otros tipos de palmas. Sus ramas y hojas son una buena opción para los jardineros y la gente que busca una apariencia tropical en un pequeño espacio. Estas palmeras crecen muy bien al aire libre en ambientes tropicales y subtropicales y de igual forma pueden cultivarse en macetas, tanto en el interior como en el exterior.

Plantar una palmera datilera enana al aire libre

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   Escoge un área para plantar la palmera enana en donde tenga algún tipo de protección contra el viento. Una zona cercana a una pared o debajo de un árbol le brindará protección. Este tipo de plantas crecen tanto a la sombra como a pleno sol. Recuerda que la palmera tendrá un grosor de unos 5 pies de ancho, así que ten esto en cuenta cuando excaves el agujero.

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   Elimina todas las malezas y hierbas de la zona en donde realices la plantación. Deja al menos un pie libre de malezas en torno a la palmera, esto permitirá una buena filtración de los fertilizantes en el suelo y hará que la planta crezca sin restricciones.

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   Excava un área dos veces más grande y más profunda que el contenedor en el que se ecuentre la palmera datilera enana. Con la ayuda del rastrillo, afloja el suelo circundante.

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   Coloca abono dentro del agujero y mézclalo con el suelo existente. No añadas ningún abono a la mezcla de la tierra, a menos que sea del tipo de liberación, como el granulado Osmocote, ya que no deberás quemar las raíces mientras estén tratando de adaptarse a la nueva zona.

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   Retira la palmera enana de su recipiente y sitúala dentro del agujero. Asegúrate de no colocarla dentro del suelo a una mayor profundidad de la que tenía en su maceta original. Esto le generaría estrés y le provocaría dificultades para crecer y adaptarse a su nueva área. Llena el hueco en torno a la palmera y apisónalo con fuerza para eliminar el aire.

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   Riega bien la planta. Las palmeras datileras enanas adoran el agua (aunque no tanto como para vivir dentro de ella) y deben ser regadas por lo menos tres veces por semana durante los meses más calurosos. En el invierno, la planta requerirá de riego dos veces a la semana. Si tu palmera se encuentra en plena sombra, puedes reducir la frecuencia de riego a la mitad.

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   Fertiliza la planta cada tres meses con un abono específico para palmeras. Podrás conseguirlo en la tienda de jardinería de tu barrio. Este tipo de plantas adoran el fertilizante, por lo que cuanto más regularmente la fertilices, mejor crecerá.

Plantar una palmera datilera enana en una maceta

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   Escoge una maceta que sea apropiada para la palmera. Debido a que probablemente no quieras volver a transplantarla en el futuro, cuando crezca en tamaño, selecciona un maceta que le de espacio para el crecimiento. Ten en cuenta que un recipiente de 3 galones albergará a una palmera de 1,5 a 2 pies de altura, uno de 7 a una de 3 a 3,5 pies, un contenedor de 15 galones será útil para una de 4 o 4,5 pies, y para las que sean más grandes necesitarás una maceta de 25 galones. Hacer crecer una planta en un recipiente que sea demasiado pequeño puede provocar que eche sus raíces hacia afuera, haciendo que deje de crecer.

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   Selecciona el área en la que tu palmera datilera enana vivirá. Si estás tratando con una palmera de gran tamaño, es posible que debas situar la maceta en el lugar en el que se alojará antes de transplantarla allí dentro. De lo contrario, luego podría ser demasiada pesada para moverla. Tu palmera crecerá bien en un porche, en el exterior o el interior. También lo hará en el interior, en una zona en la que reciba algo de luz.

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   Llena el recipiente con la mezcla de tierra. No debes colocar directamente tierra para macetas, ya que no drena muy bien y tiene una tendencia a provocar encharcamientos. La mayoría de las mezclas para macetas tienen tierra y musgo, lo que sí permitirá el medio para que drene de forma adecuada. También puedes encontrar mezclas para macetas que poseen fertilizantes de liberación. De esta manera, tu palmera se nutrirá de forma constante por un período prolongado de tiempo, mientras los gránulos del fertilizante se descompongan con el riego.

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   Deja suficiente espacio en el centro del recipiente y de la mezcla de tierra para colocar la palmera. Plántala dentro de la maceta a la misma profundidad que se encontraba en la originaria. Cubre el hueco abierto con tierra y apisona con firmeza.

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   Riega bien tu palmera datilera enana. Revisa el suelo para verificar su sequedad. Si se siente seco, riégala. Probablemente necesite ser regada, al menos, una vez por semana. Fertiliza tu planta una vez al mes con un fertilizante soluble en agua.

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7. Escrito por Joyce Starr